El cerebro podría mostrar cambios 30 años antes de aparecer los primeros sintomas de Alzheimer
Científicos de la Universidad Johns Hopkins en Baltimore (Estados Unidos), han detectado cambios biológicos y anatómicos en el cerebro, relacionados con la enfermedad de Alzheimer, que ocurren entre 3, 10 e incluso algunos 30 años antes de la aparición de los primeros síntomas reconocibles de esta demencia.
Los científicos responsables de esta investigación, revisaros los registros médicos de 290 sujetos mayores de 40 años, la mayoría de los cuales tenían al menos un pariente de primer grado con una demencia del tipo de la de Alzheimer. Se les realizaron análisis del liquido cefalorraquídeo y exploraciones cerebrales de resonancia magnética cada dos años en un período de 10 años (de 1995 al 2000). También se llevaron a cabo pruebas estándar de memoria, aprendizaje, lectura y atención anualmente de 1995 a 2013.
Ya que los 290 participantes del estudio eran cognitivamente normales cuando comenzó el estudio, se pudieron encontrar varias características biológicas y clínicas asociadas con la enfermedad de Alzheimer en los años previos a la aparición de sus síntomas. En su última revisión dentro del estudio, 209 de ellos seguí siendo cognitivamente normal, mientras que 81 fueron diagnosticados de deterioro cognitivo leve o demencia por la enfermedad de Alzheimer.
En estos 81 sujetos, se encontraron cambios sutiles en la puntuación de las pruebas cognitivas de 11 a 15 años antes del inicio claro del deterioro cognitivo También se encontraron aumentos en la tasa de cambio de una proteína llamada Tau (que durante mucho tiempo se le ha considerado un marcador de la enfermedad de Alzheimer), hasta 30 años antes de la aparición clara de la enfermedad gracias al análisis de líquido cefalorraquídeo.
Sin embargo los investigadores añaden que los cambios cerebrales varían ampliamente en las personas y, por tanto, su estudio pretende reflejar un nivel promedio de estos cambios encontrados en un pequeño grupo de estudio, pero no sacar conclusiones precisas sobre los cambios cerebrales en personas individuales. Por el momento, este trabajo podría servir para desarrollar una prueba para determinar el riesgo relativo de un individuo de padecer la enfermedad de Alzheimer.
The brain could show changes 30 years before the first symptoms of Alzheimer appear
Scientists of the Johns Hopkins University in Baltimore (United States), have detected biological and anatomical changes in the brain, related to Alzheimer's disease, which occur between 3, 10 and even some 30 years before the appearance of the first recognizable symptoms of this dementia.
The scientists responsible for this research, review the medical records of 290 subjects over 40 years, most of whom had at least one relative of first degree with a dementia of the type of Alzheimer's. Cerebrospinal fluid analyzes and MRI scans were performed every two years over a period of 10 years (from 1995 to 2000). Standard tests of memory, learning, reading and attention were also carried out annually from 1995 to 2013.
Since the 290 study participants were cognitively normal when the study began, several biological and clinical characteristics associated with Alzheimer's disease could be found in the years prior to the onset of their symptoms. In their last review in the study, 209 of them remained cognitively normal, while 81 were diagnosed with mild cognitive impairment or dementia due to Alzheimer's disease.
In these 81 subjects, subtle changes were found in the score of cognitive tests from 11 to 15 years before the clear onset of cognitive decline. Increases in the rate of change of a protein called Tau (which for a long time was considered a marker of Alzheimer's disease), up to 30 years before the clear onset of the disease thanks to the analysis of cerebrospinal fluid.
However, the researchers add that brain changes vary widely in people and, therefore, their study aims to reflect an average level of these changes found in a small study group, but not to draw precise conclusions about brain changes in individuals. For the time being, this work could be used to develop a test to determine the relative risk of an individual suffering from Alzheimer's disease.