La importancia de la Memoria de Trabajo
¿Alguna vez habéis ido a hacer la compra sin lista porque pensabais que os acordarías de todo, pero al llegar a casa os disteis cuenta que os habías dejado alguna cosa?
Si esto os ha pasado alguna vez, es porque os habéis encontrado con las comunes limitaciones de la memoria trabajo (MT), memoria operativa o Working Memory. Esta memoria fue definida por Baddley y Hitch en el 1974 como la memoria de corto plazo, capaz de: retener y manipular temporalmente la información mientras participa en el aprendizaje, recuperación, comprensión y razonamiento. Es decir, que involucra simultáneamente el almacenaje y manipulación mental de la información (1). Podríamos decir que la memoria de trabajo es el post-it mental que usamos para registrar la información hasta que necesitamos usarla.
"La memoria de trabajo es el post-it mental que usamos para registrar la información "
La memoria operativa también nos permite mantener una conversación, reteniendo una serie de palabras para poderlas analizar y así dar respuesta. O bien, retener un número de teléfono cuando queremos hacer una llamada y olvidarlo, o por lo contrario guardarlo en la memoria de largo plazo.
La memoria de trabajo es fundamental e aquí 3 aspectos donde interviene:
Acceso a la información
Hay dos tipos de memoria funcional: auditiva y visual – espacial. Podríamos semejar esta función a la actividad a la de grabar un vídeo donde se capturan las imágenes (memoria visual) y se graba el audio (auditiva). Pero la memoria de trabajo va más allá y es que a la vez que está almacenando toda esta información para usarla más tarde, además, está siendo tomada y reproducida inmediatamente al mismo tiempo que se está incorporando nueva información.
Un ejemplo muy clarificador, es el de los estudiantes tomando apuntes. Mientras el profesor dicta, el alumno capta esta información (memoria auditiva) y escribe en su hoja mientras a la vez está escuchando nueva información que tendrá que retener para escribirla.
Recordar instrucciones
Todos dependemos de la información entrante como de la almacenada, para hacer cualquier actividad. Las personas que tienen limitaciones en la memoria de trabajo puede ser todo un reto el seguir instrucciones de muchos pasos, ya que tendrán problemas a la hora de tener en mente lo que sigue a continuación mientras hacen lo del momento.
Atención
La memoria de trabajo también es responsable de gestionar distintas unidades de atención, pero tiene una capacidad limitada. Varios estudios han demostrado que una persona media puede procesar como máximo unas siete unidades de atención a la vez, aunque lo normal es que se gestionen entre cuatro o cinco. Pero esto no quiere decir que podamos estar atentos a cinco cosas exactamente al mismo tiempo, sino que la memoria operativa gestiona la alternación de la atención y divide la misma para que casi en el mismo instante podamos activar un foco de atención, relacionarlo con otro, volver al foco anterior y a la vez realizar una tarea automática.
Es así como a través de un exceso de información bloquean nuestra memoria de trabajo y capacidad de atención. A continuación, os dejamos un video muy interesante en el que podréis poner a prueba vuestra memoria operativa.
¿Seréis capaces de encontrar las soluciones?
¡Hackea tu memoria!
(1) Tulving E. Episodic memory and common sense : how far apart ? R Soc. 2001;356:1505–15. Accessible en: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/labs/articles/11571040/